Recientemente terminó el rodaje del cortometraje Pozo del Diablo, una coproducción del IUPA junto a la provincia de La Pampa y al Municipio de 25 de Mayo.

El corto es una adaptación del cuento original ¨Pozo del Diablo¨ del escritor Edgar Morisoli, considerado uno de los grandes poetas pampeanos, pero nacido en Acebal, Provincia de Santa Fe.

El filme relata un encuentro personal del autor y su compañero con un ánima, una apariencia, en algunos pagos conocido como mandinga, pero sobre todo como el Diablo. Sin embargo, a la vez, rescata y resignifica la identidad pampeana, de las puesteras y puesteros del oeste pampeano. Describe sus detalles geográficos, culturales, los usos y formas de sus habitantes.

Este encuentro sucede en la década del 60, y según recuerda Edgar Morisoli, eran épocas de Dictadura, ya que él estaba cesanteado del estado y lo contrataban como agrimensor particular. Allí aparece la figura del Ingeniero Juan Carlos Suárez con quien tienen que hacer el trabajo en Puerta de la Mesilla y que lo lleva por los caminos de Ayala, Quircacó, Agua Rica.

El equipo se conformó con Esteban Beretta como director y editor; Ezequiel Ziaurriz Culla como asistente de dirección y storyboard; Juan Galo Santamarina como productor general; Alex Scheffer como cámara y DF; Mailen Heuberger como asistente de cámara y DF; Rodrigo Garabito como sonidista en rodaje y postproducción; Nicolás Ibarra como asistente de sonido y edición; Pablo Joubert como sonidista musical y postproducción; Sofía Schmidt como directora de arte y fotografía backstage; los choferes Carlos, Néstor y Mario.

El elenco fue compuesto por Pablo Solo Díaz, Ricardo Peinado y Daniel ¨Tato¨ Corrales. Colaboraron también, como extras, Daniela Retamal, Roberto “Colo” Parra y Fran Lara. También, la perra Victoria (galgo).

La música fue compuesta por José Gabriel Santamarina, Rebel Democracy (Roberto Tello, Delfor Pérez, Juan Manuel Santamarina), Cachín Palomeque y Guillermo Mareque.

Compartimos la crónica de viaje del productor J.Galo Santamarina:

«Este encuentro sucede en la década del 60, y según recuerda Edgar Morisoli, eran épocas de Dictadura, ya que él estaba cesanteado del estado y lo contrataban como agrimensor particular. Allí aparece la figura del Ingeniero Juan Carlos Suárez con quien tienen que hacer el trabajo en Puerta de la Mesilla y que lo lleva por los caminos de Ayala, Quircacó, Agua Rica.

Comenzamos a darle forma en 2017 Esteban Beretta y Juan Galo Santamarina, Director y Productor, respectivamente, de Contenidos Audiovisuales del CDP IUPA y fue presentado en el presente año para realizarse en 4 días de intenso rodaje, en 3 ciudades diferentes: General Roca – La Pulpería de Paso Córdoba-, 25 de Mayo –Pozo Pampa- y Puelén –Puesto Romero y Cueva del Julepe-.

Y no faltaron las vicisitudes y aventuras. El viernes Sofía pisó y portó la “suerte” hacia la camioneta, no sin antes echar culpa al inocente productor. En fin nos trajo suerte, olorosa, pero suerte al fin.

El sábado salíamos temprano, casi a reloj, nos faltaba recoger a Javier Témoli por Cipo, ya que era nuestro Master Drone, pero llegando a Allen nos acordamos de un equipo que nos faltaba, volvimos, lo llevamos, buscamos a Javier una hora tarde y, al final de cuentas, el equipo que nos retrasó no se usó. Que lo parió.

Llegamos a La Pampa, buscamos a Victoria, a la Loba y y en el momento preciso de arrancar, dejó de andar. INCREÍBLE. Salimos disparados a buscar al dueño, cuando nos avisan “arrancó el drone y también la camioneta”.

El domingo era un día intensísimo. La Loba se iba en camilla hasta el campo en Puelen y nosotres en la traffic junto a la estelar Victoria. Llegar fue dentro de todo fácil. El transportista se convirtió en chofer de rodaje y se adentró con la Loba y el equipo de filmación. Allí nos esperaba Romero, a quien le avisamos nuestro arribo por la Cadena Solidaria de la radio municipal. Con algún que otro problema, el paisano nos dejó a gusto en su puesto. Puesto que la Loba casi se lleva por delante de noche cuando fallaron los frenos, por suerte solo fue un susto para los tres actores, que con extraña pasividad afirmaron por handie “Creo que tenemos problemas de freno”. La loba durmió en el puesto.

Caminata a la Cueva del Julepe. Aquí teníamos un problema, Romero no podía acompañarnos nos decía y al mismo tiempo aparecía una camioneta nueva con la familia Becaría (nuevos dueños de esa legua) acompañados de la familia Reyes. Y ahí nos endilgamos primero al asado conjunto del mediodía y segundo a la aventura de la Cueva que las dos familias aún no conocían. Gracias a su baqueanía aquí estamos, contándolo.

Último día de rodaje, los planetas se alinearon la Loba llegó y anduvo sin ningún problema. Conseguimos el teodolito, trípode, un estereo antiguo y el viejo aeropuerto donde ahora viven dos policías que muy amablemente nos dieron acceso al lugar y a electricidad.

La música fue compuesta por José Gabriel Santamarina, Rebel Democracy (Roberto Tello, Delfor Pérez, Juan Manuel Santamarina), Cachín Palomeque y Guillermo Mareque.

Pero este proyecto no sería realidad por mucha gente más, instituciones, empresas, comercios. Sinceramente les expresamos nuestro cariño y gratitud a Guillermo Adán Romero, puestero lindero de la Cueva del Julepe. A Samuel Corvalán, la familia Becaría y Reyes que nos acompañaron a la Cueva monte adentro, con baqueanía. A la familia Lang por dejarnos llevar a Victoria como parte vital del equipo. A la familia Cirer Benitez por cedernos 3 días consecutivos la Ford Loba F100 y acompañarnos sin interés alguno. A la familia Santamarina por la atención brindada en el viaje de PreProducción. A Don Hector “Sapo” Benitez y Orfe por la ropa que necesitábamos. A Edgar Morisoli por su hermoso cuento y el cariño con el que nos atendió.

Las empresas y comercios Alfonso Resto Jaus, Lupa Inmobiliaria, Ribeiro SRL, Don Luis Servicios, Workmen, Casa de Ramos Generales, Electrocomp, Ossadía Almacén y Forrajería “La Sureña”. La Pulpería de Paso Córdoba, un lugar único. A la productora FRATER y Larrubia. A Sewald por transportar la Loba con profesionalismo y hacernos el aguante más de la cuenta.

Al Gobierno de la Provincia de La Pampa, a través de la Secretaría de Cultura, la subsecretaría de Turismo, el Ente Provincial del Río Colorado y la Legislatura por su leal acompañamiento. Al municipio de 25 de Mayo y la Dirección de Cultura por su apoyo incondicional y fraterno.

En Memoria del Diablo González, que en paz descanse paisano.

Ahora viene la edición. Un adelanto para septiembre. Y la vemos en noviembre. Si Pugliese nos acompaña».