Crear la magia audiovisual

En el currículum de Matias Buenaventura aparecen varias empresas muy reconocidas del ámbito televisivo y audiovisual: Cinecolor, Fashion TV, Polka.

Matias cumple distintos roles y tareas en la vorágine corporativa y junto a su socia Mila Cascallar, decidieron armar su productora: Les emme un lugar propio donde poder explorar y alimentar la creatividad.

Hoy, a este egresado de Artes Audiovisuales la realidad lo encuentra abrevando en ambas corrientes: trabaja en proyectos de Polka, y dirige su propia productora.

Asentado en Buenos Aires desde 2008, su devenir profesional lo llevó a profesionalizarse en cursos sobre fotografía para cine y filmación en 35 mm. A mediados de ese año ingresó a Polka como asistente de edición.

“Fue mi primer trabajo grande. Trabajé en Amas de casa Desesperadas (2da temporada) como asistente de edición y logueo, y en Epitafios (2da temporada) como asistente de coordinación de post hasta mediados de 2009. En 2010 hice algunos trabajos de camarógrafo para Fashion TV y edición de los programas”, resume Matías.

De su paso por IUPA, Matias tiene buenos recuerdos. “Es una carrera hermosa”, refiere. Graduado de la carrera de Artes Audiovisuales en 2007, siempre supo que su destino era la gran ciudad.

En 2011 le surgió la posibilidad de ingresar a Cinecolor. Tuvo que decir adiós a los viajes, los desfiles y la moda de Fashion TV.

“Fue una decisión difícil, pero yo quería seguir aprendiendo y creciendo profesionalmente: entrar a Cinecolor era ir en busca del conocimiento, directo a la industria del cine”, señala.

Así las cosas, empezó como operador de tape. “Entré a lo que se llama «sala de máquinas». Esa fue la base para todo lo que venía, agarré la última etapa de fílmico y de tape. En ese momento todavía hacíamos muchos transfer de 35mm a digital. Ahí aprendí el rol de colorista, me sentaba horas al lado de los coloristas, ayudaba a cargar rollos y les preguntaba cosas”, rememora.

Ese bagaje de conocimientos lo llevó a Polka, la empresa dirigida por Adrián Suar, como colorista, para consolidar lo aprendido. “Hice muchas series de ficción, coproducciones con Disney y ahora con plataformas, HBO, Flow, Warner & Discovery, Starplus”.

Con el correr del tiempo, se cansó de “estar sentado todo el día, clavado en la silla”, tarea inherente a la postproducción. En 2021 pudo pasar al área de rodaje. “La propuesta era otra, una totalmente técnica: me ofrecieron ser DIT (Digital image technician), un nuevo rol que surge con las cámaras de cine digital, muy técnico y requiere de amplio conocimiento de fotografía, cámara y tecnología. Acepté sin dudar”.

En este nuevo rol, Matias pudo desarrollar tres series: María Marta: el crimen del country, Los protectores 2 y El hombre oculto, aka Chaira.

En este devenir por el camino audiovisual, Matias hizo publicidad, videos musicales, ficción y hasta producciones para el Estado.

“Una gran diferencia es la cantidad de gente implicada en cada proyecto. En publicidad, los clientes tienen un equipo de gente especializada que habla por ellos, y en general hay una agencia en el medio, que es otro grupo de personas especializadas en vender su marca – observa – . En ficción, el cliente en general es socio productor. Cuando hacés un videoclip independiente, en general el cliente es el artista. El artista también suele ser el productor, el que lleva los equipos en el auto, compra el catering, etc. Lo da todo y es una sola persona, suelen auto financiar sus proyectos”.

En este sentido, también cuenta la ecuación financiera: “Trabajar para esos formatos tan diferentes es una experiencia tan distinta en sí casi tanto como lo son los presupuestos con los que cuentan. En mi caso, disfruto haciendo piezas audiovisuales, se trata de satisfacer al espectador, de generar un vínculo, de sorprenderlo y hay veces que uno se enamora de un corte hasta que llega el cliente y te lo cambia todo”.

Lo propio y lo ajeno

Al director y postproductor siempre le gustó más “el campo” de lo audiovisual: dirigir, intercambiar ideas, “ver cómo se va creando la magia por todas las áreas”, añade.

Esta búsqueda fue gestando Les Emme, que surgió en 2017 junto a Mila, diseñadora de Imagen y Sonido, también compañera de Polka.

Con un nombre que hace referencia a sus iniciales, empezaron dirigiendo juntos algunos videoclips. “Poco a poco nos fuimos metiendo en publicidad, ahora estamos en la preproducción de un cortometraje”. Para Matias, el disparador fue gestar algo propio y dejar de estar “siempre trabajando para otro”.

“Trabajamos muy bien juntos. Dirigir una pieza audiovisual requiere de mucho conocimiento de todas las áreas; no podés pedir nada si no sabes cómo lo hacen y entre los dos nos complementamos en diferentes áreas y buscamos una mirada en común.

Ahora estamos en proceso de guión, un corto de ciencia ficción”. Y “por ahora”, dice Matías, cada uno tiene su trabajo fijo: Mila es supervisora de post en Blink, una productora de Estados Unidos. “Vamos llevando nuestros proyectos de Les Emme en paralelo a nuestra vida corporativa”.

En su trabajo fijo está involucrado en la postproducción de Polka producciones y su último trabajo en set fue para El hombre oculto una coproducción con Starplus. “En esta serie tuve dos roles: DIT & data manager. El DIT es un jefe técnico y está a cargo de todo lo que está implicado a la cámara. Maneja los seteos de cámara, la conectividad, el monitoreo, el timecode, etc. Cualquier problema técnico durante el rodaje hay que solucionarlo.

El data manager descarga el material de cámara y envía a postproducción. Esta última serie fueron 80 jornadas; ahora está en online, que es la etapa de corrección de color, vfx y sonido”, detalla.

“Esta es una carrera que va muy ligada a la tecnología, todo el tiempo se va actualizando técnicamente mientras cambian las tecnologías pero sigue manteniendo su esencia y su sensibilidad. Las tecnologías cambian pero siempre estamos filmando una idea, todo empieza con una hoja en blanco”.